Doncella o una mala educación sexual

Cómic del mes de abril de la Biblioteca de la Universidad de La Rioja, el número 136.

 Doncella 1 y 2 es un cómic de Florence Dupré La Tour, autora francesa aunque nacida en Argentina en 1978. Florence nos cuenta el lado oscuro de su infancia en Buenos Aires. Sus padres, una familia acomodada, forman parte de la más pura tradición cristiana, burguesa y retrógrada. Su educación está llena de tabúes, sobre todo en lo referente a la sexualidad, con traumáticas consecuencias para Florence; su madre antiabortista no le explica ni lo que es la regla, ni la higiene necesaria, etc. Crece llena de miedos hacia la feminidad y la sexualidad. Aunque es una autoficción, la autora reconoce que se ha documentado.

Lo que más nos gusta del cómic es el tono, tragicómico, exagerado y a la vez sincero. Y por supuesto el dibujo, suelto, alegre y muy divertido. Rostros muy expresivos, con muchas muecas, muy locos, casi caricaturas. Con mucho rosa referente al amor, a los sentimientos y mucho rojo que parece simbolizar la sangre, la regla, la violencia. Desde luego no tiene pelos en la lengua y refleja muy bien los tabúes, el patriarcado y de alguna forma desnuda los fanatismos que aún perduran en algunos ambientes de nuestra sociedad. Esa mezcla entre humor y profundidad convierte este cómic en una joya. ¡No se la pierdan! Cómic del mes de la BUR, el nº 136.

Krazy Kat: cómic del mes de marzo de la BUR

Krazy Kat es una gata o gato (enigma que ha quedado sin resolver) enamorada del ratón Ignatz, un ratón que responde a ese amor a ladrillazo limpio. El agente Pupp (Cachorro), un perro, siempre intenta proteger a Krazy y castigar a Ignatz. Y este es todo el entramado argumental.

George Herriman era un afroamericano nacido en Nueva Orleans cuya familia se mudó, cuando él tenía 12 años, a Los Ángeles, huyendo del clima racista de Luisiana. A los 16 años se marcha a Nueva York para trabajar como dibujante de prensa. Era un gran amante del desierto americano y se acabó instalando en California. Empezó dibujando tiras cómicas y así nacieron los personajes de Krazy Kat. Las historias son una mezcla de surrealismo, romanticismo, encanto, ternura, humor y filosofía. El dibujo es en blanco y negro, hasta 1935 no se publicaron en color, lleno de detalles y con escenas muy sofisticadas. Dibujos llenos de frescura y dinamismo. Las páginas pueden estar divididas en pequeñas viñetas o muy grandes, enmarcadas o sin marco, numeradas o no, con mucho detalles o muy sencillas. Y a pesar de todos estos cambios consigue una gran armonía.

Cuatro años han tardado en la editorial La Cúpula en preparar esta recopilación que ahora nos presentan. Pero la espera ha valido la pena, estamos ante una obra de coleccionista. Un volumen que recoge los dos primeros años de páginas dominicales restauradas, traducidas y rotuladas para la ocasión. Su traductor, Rubén Lardín, reconoce que es el trabajo más difícil que ha hecho pero también el más gratificante. Krazy Kat es lo mejor que he leído nunca. La obra más hermosa que he leído jamás. Sin ser siquiera un libro, ni mucho menos una novela gráfica, es a la vez poemario, misal y ensueño.

Por eso y por mucho más Krazy Kat es el cómic del mes de marzo, el número 135. Solo podemos añadir que os espera en la planta baja de la Biblioteca de la Universidad de La Rioja. ¡Que disfrutéis de estos días de fiesta de Semana Santa!

Paco Roca lucha contra el olvido

El periodista Rodrigo Terrasa se quedó enganchado a la historia de Pepita Celda, una anciana de ochenta años empeñada en rescatar los huesos de su padre fusilado al final de la Guerra Civil. Tan enganchado que convenció a su amigo Paco Roca para que dibujara y contara su historia. Juntos han creado El abismo del olvido.

Han tenido que documentarse a fondo para contextualizar la historia. Y el resultado es una obra ágil que provoca curiosidad y ganas de saber más. Sin duda, nos lleva a reflexionar sobre nuestra historia, a preguntarnos las razones por las que quedan tantas fosas comunes sin identificar. Pepita consigue por fin su propósito pero queda mucho por hacer.  Lo hemos elegido Cómic del mes de febrero, el nº 134. Os espera en la planta baja de la Biblioteca de la Universidad de La Rioja. En este vídeo de la Fundación Telefónica podéis escuchar a Paco y a Rodrigo explicando muchos detalles del proceso de creación de esta obra que lucha contra el olvido.

Aline Kominsky Crumb

Aline Kominsky Crumb, se llama Callo a sí misma en los cómics, fue una de las precursoras del cómic underground en Estados Unidos. Una mujer sin pelos en la lengua, en sus historias cortas habla de sexo, drogas, alcohol, amor, dolor y muerte.

Reservoir Books ha compilado ahora en un magnífico volumen las historias que produjo desde finales de los años sesenta hasta 2014. En ellas relata episodios de su vida y la de su familia. De trazo irregular, los personajes resultan toscos y exagerados, y sin embargo aunque parezca contradictorio despiertan cierta ternura.

¿Por qué Aline ha envejecido tan bien, por qué con el transcurrir de los años sigue estando tan viva? Pues sin duda por su aplastante sinceridad. Cuenta su verdad, no tiene miedo alguno a mostrarse imperfecta, nos cuenta cosas que habitualmente ocultamos, que no nos atrevemos a mostrar en público. Y lo hace sin sentimiento de culpa y con humor. Y por todo eso hemos elegido Querido callo, cómic del mes de enero de la BUR, el número 133. ¡Os espera en la planta baja de la BUR!

El cielo en la cabeza

Este mes de diciembre queremos dar visibilidad a un cómic que aborda el tema de la inmigración: El cielo en la cabeza. Nos cuenta la historia de un niño, Nivek, nacido en el Congo, obligado a trabajar extrayendo coltán (ese mineral que necesitamos para nuestros móviles) en condiciones infrahumanas. Se convierte luego en un niño soldado, huye e intenta llegar a Europa. El cómic recoge ese viaje por la selva, la sabana, el desierto, Libia y el Mediterráneo. Nivek, como tantas otras personas busca un futuro.

El guión lo firma Antonio Altarriba (El arte de volar), Premio Nacional de Cómic 2010 y el dibujo Sergio García (Premio Nacional de Ilustración 2022). El color está a cargo de Lola Moral: luminoso, transparente y lleno de vida. El dibujo de Sergio García (Granada, 1967) deforma la realidad, utilizando geometrías y está muy presente el arte africano: máscaras, estilización de las figuras, etc.  No se regodea en la representación de la violencia; utiliza todo tipo de planos, generales, cortos, primeros planos, etc. Nos gusta especialmente la portada (cubierta), tiene mucha fuerza.

Está seleccionado en la competición oficial del Festival de Angulema de 2024, de momento nosotros lo hemos elegido Cómic del mes de diciembre de la BUR, el número 132. No es lo mismo pero todo suma. Os espera en la planta baja.

Alison de Lizzy Stewart

Este mes de noviembre nos deja un cómic escrito y dibujado por Lizzy Stewart, una joven inglesa, a la que comparan con Posy Simmonds (Tamara Drewe) y Edna O’Brien (Las chicas de campo).

Ambientada en el Londres de los años ochenta, Alison es una joven ingenua, recién casada con un buen hombre bastante aburrido. Estar encerrada en su cabaña de la costa, sin nadie con quien hablar y casi todo el día sola, la anima a matricularse en una clase de dibujo impartida por un famoso y respetado pintor, casi treinta años mayor que ella. El pintor, que es también un conquistador, la invita a marcharse con él a Londres. Y es aquí donde empieza una nueva vida para Alison.

Aunque la historia puede parecer manida, esconde una interesante reflexión sobre la libertad, el desarrollo personal, las pasiones y las relaciones sentimentales. Y refleja muy bien el mundo del arte y el narcisismo de los genios. Combina narración (sin bocadillos) con diálogos en bocadillos. Integra también cartas, notas, recortes de prensa y bocetos. Sin apenas color, utiliza una paleta de tierras y grises sin estridencias.

Una hermosa historia que atrapa desde el principio y te espera en la planta baja de la Biblioteca de la Universidad de La Rioja. Alison, cómic del mes de noviembre, el número 131. Lee aquí las primeras páginas.

Borja González, Premio Nacional de Cómic 2023

Borja González ha sido galardonado con el Premio Nacional del Cómic de 2023 otorgado por el Ministerio de Cultura de España. El premio está dotado con 30.000 euros.

Por la lírica, el surrealismo y por un trabajo gráfico de una gran elegancia y exquisita belleza con la que su autor construye un álbum tan divertido de leer como profundo y fascinante. Una obra de carácter neogótico en la que destacan la fuerza y la vitalidad de sus protagonistas femeninas.

Asimismo, el jurado ha señalado que Borja González es capaz de transmitir con su trabajo unas emociones que atrapan y enganchan a través de sus estilizados personajes sin rostro. Grito nocturno es una obra con un punto onírico y cotidiano a la vez, que hace soñar y participar al lector.

Forma parte de una trilogía, aunque son obras independientes, comparten atmósfera. El primer título es The black holes, y el tercero El pájaro y la serpiente que se acaba de publicar. Nosotros solo añadiremos que lo hemos elegido Cómic del mes de octubre, el número 130. Los tres los tenéis disponibles en la planta baja de la Biblioteca de la Universidad de La Rioja.

Este mismo año ha cerrado la trilogía con la publicación de El pájaro y la serpiente.

Nadie como tú de Catalina Bu

Catalina Bu (Chile, 1989) con su cómic Nadie como tú publicado por Fulgencio Pimentel. Fotografía: Raphael Sierra (Diario Concepción de Chile)

Este mes de septiembre nos trae un cómic, el nº 129, en blanco y negro, dibujado a mano durante la pandemia por la chilena Catalina Bu. El texto situado fuera de las cajas es escaso y el dibujo hecho con lápiz parece casi un boceto, casi como sin ganas, como la propia historia. Asegura Catalina Bu que empezó a dibujar durante la pandemia, sin guion ni escaleta, con un estilo simple y casi improvisado que al final terminó convirtiéndose en un retrato de su propia vida.

También cuenta que conoció a César Sánchez, editor de Fulgencio Pimentel, durante el Festival Internacional del Cómic de Angulema (Francia) y que conectaron desde el primer momento y surgió la idea de hacer un proyecto juntos. Y Nadie como tú es ese proyecto. Nos ha cautivado porque la protagonista cuenta cosas que ocultamos, que no nos atrevemos a decir, porque llora, porque va a ver a una psicóloga, porque ayuda a su vecina que está a punto de morir y porque su dibujo tiene algo de primitivo, ligero y despojado de artificios. Os espera en la planta baja de la Biblioteca de la Universidad de La Rioja. 

Un cómic que habla de la precariedad en el empleo de los jóvenes

Este mes de agosto que se acaba nos deja un cómic, el número 128, que habla de la precariedad en el empleo de los jóvenes.

Una joven escultora busca desesperadamente un empleo a la altura de sus expectativas y lo encuentra en un estudio de diseño, Rotunda, regentado por Delfín. Este jefe con apariencia de enrollado es un hijo de papá, un pijo sin ningún principio. De hecho es su padre el que suelta perlas como Los principios son para que los pobres sigan siendo pobres. (Página 71)

Roza además, sin cargar las tintas, el tema del machismo imperante en nuestra sociedad. Aunque habla de un tema serio tiene también su puntito de humor y resulta muy ligero de leer. Gráficamente es muy atractivo, con colores y estilo muy personales. Su joven autora, Candela Sierra, es también ilustradora. Este es su primer cómic y ha podido publicarlo porque ha ganado el V Premio València de Novela Gráfica 2022. Os espera en la planta baja de la Biblioteca.

Mortadelo y Filemón

Francisco Ibáñez con sus personajes Mortadelo y Filemón. Imagen del periódico El comercio. R.C.

El pasado 15 de julio murió Francisco Ibáñez, el creador de los famosos Mortadelo y Filemón entre otros personajes. Hemos querido hacerle un pequeño homenaje eligiendo a estos incompetentes detectives para nuestra sección de Cómic del mes de julio, el número 127.

Ibáñez era un trabajador incansable, un hombre muy perfeccionista, cuidaba mucho el lenguaje, siempre tenía el diccionario cerca. En cuanto al dibujo era autodidacta, no se creía un gran dibujante, él lo que quería era entretener. Insistía en que hay grandes dibujantes pero sin un buen guión el tebeo no funciona. Es rara la casa en la que no hay un Mortadelo pero si quieres rememorar muchos de sus tebeos te esperan en la planta baja de la Biblioteca. Se nos ha ido Ibáñez pero nos quedan sus personajes.